DÍA INTERNACIONAL DE LOS TRABAJADORES
Trabajadores y trabajadoras en números: un punto de partida
Un poco de historia y un poco de actualidad. Este 1 de mayo te contamos el origen de la conmemoración y repasamos datos sobre la participación de mujeres y varones en la economía. La brecha de género y las horas de trabajo no remunerado en los dos grupos.
Hoy se celebra el Día Internacional de los Trabajadores. Una fecha de conmemoración del movimiento obrero. Similar a lo que sucede el 8 de marzo, con el Día Internacional de la Mujer, se trata de una jornada de reivindicación, reflexión y, en este caso, también de descanso, ya que es un feriado en casi todos los países del mundo.
La fecha se estableció en 1889 en París, por acuerdo del Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional. Se definió ese día en homenaje a los llamados Mártires de Chicago, un grupo de sindicalistas anarquistas ejecutados en Estados Unidos por participar de las luchas por la jornada laboral de ocho horas.
En Argentina, la primera conmemoración se hizo el 1 de mayo de 1890. Un grupo de trabajadores se reunió en una plaza de Recoleta para presentar un petitorio a las autoridades en reclamo de sus derechos.
A nivel internacional, la adopción universal de la jornada laboral de ocho horas se aprobó en 1919. Fue durante la primera conferencia de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Participación, brecha y trabajo no remunerado
Para hablar de este día, el segundo que nos toca vivir en pandemia, elegimos pensar en la participación de las mujeres y los varones en la economía a través de un análisis sobre Autonomías que llevó adelante la organización sobre género y trabajo Grow. Los países que toma son siete: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, México, Perú y Uruguay.
Según el informe de Grow -que utiliza datos de 2019 y 2020 provenientes de fuentes internacionales y de organismos nacionales-, en América Latina en promedio la tasa de participación de las mujeres en la economía es del 51%, mientras que la de los varones es del 72%. Esto indica una brecha de género del 21% entre los diferentes países.
Sin embargo, las situaciones son muy diversas. El porcentaje mayor lo tiene México, con una brecha del 32,7%, y el menor Uruguay, con el 13,8%. Según datos del tercer trimestre de 2020 del Indec, Argentina tiene un 45% de participación de mujeres y un 64% de varones.
Respecto a la desocupación, la tasa promedio entre los diferentes países “es desfavorable para las mujeres con un 11,7% versus un 9,4% de los varones”. En cuanto a la la mujer, aporta un dato preocupante: “se estima que en la región, debido a la pandemia, se retrocedió 10 años, dado la gran cantidad de mujeres que pasaron a la inactividad”.
La licencia por maternidad y paternidad es otra variable que se tuvo en cuenta. En promedio, la licencia por maternidad es de 14 veces más tiempo que la licencia por paternidad en los diferentes países. De los siete mencionados, Argentina es el país que otorga menos días a los varones, tan solo 2. Uruguay es el que otorga más, aunque es de solamente 13 días.
Un último dato que nos interesa mencionar, y se vincula a lo anterior, es la proporción de tiempo dedicado a tareas domésticas y de cuidados no remuneradas según género. ¿Cómo se define el tiempo de trabajo no remunerado? Según mide la Cepal y recupera Grow, “se cuantifica el tiempo que una persona dedica al trabajo para autoconsumo de bienes, labores domésticas y de cuidados no remuneradas para el propio hogar o para apoyo a otros hogares”.
En Argentina, en promedio las mujeres dedican 42 horas por semana al trabajo no remunerado, mientras que los hombres dedican 17. Estos números están por encima del promedio general para América Latina, que indica 38,7 horas para el primer grupo y 16,9 para el segundo.
¿Por qué son importantes estos datos? Si bien el informe de Grow también trabaja cuestiones como representatividad y violencia de género, estos números en particular traen situaciones cotidianas expresadas en número que afectan tanto al trabajo remunerado como al no remunerado.
Un ejemplo muy concreto es la licencia de paternidad: con tan pocos días, los varones quedan excluidos de las tareas de cuidado. Por un lado, esto provoca que tengan más obstáculos para generar lazos con sus hijos e hijas. Por otro, y en términos más generales, esta desigualdad refuerza la feminización de los cuidados.
El foco de este 1 de mayo, entonces, es contribuir a la reflexión, para que pensemos cómo se puede lograr la igualdad de oportunidades para hombres, mujeres y diversidades en el ámbito laboral. Los datos, tan importantes para que todos trabajemos mejor, nos muestran un estado de situación, un lugar desde donde partir. …
Últimas entradas